El Día de San Valentín se celebra en algunas partes del mundo como un momento romántico para las parejas. Sin embargo, millones de niños se unen antes de estar preparados, muchas veces en contra de su voluntad. El matrimonio infantil los expone a la violencia, incluso a la violación, y a menudo les obliga a dejar la escuela y a ser padres de forma prematura.