Las matronas ofrecen cuidado, dignidad y un nuevo sentido de vida para las madres haitianas

PUERTO PRÍNCIPE, Haití – Elizabeth estaba agotada tras varias horas de contracciones en la clínica Petite Place Cazeau, en Puerto Príncipe, Haití. Finalmente, gracias a la dulce orientación de la matrona, dio un último empujón. Los gritos sofocados llenaron la sala de partos.

La enfermera presentó una niña a la nueva madre. A través de sus ojos entrecerrados, Elizabeth observaba cómo limpiaba y pesaba a su hija.

Después, en una amplia sala de recuperación, acunó a su bebé - a quien había llamado Lisa.

"Fue un poco difícil, pero me sentí segura", dijo al UNFPA, explicando que no había esperado recibir cuidados tan sofisticados.

Todo el mundo fue muy amable conmigo. A pesar de que no tenía ni idea de para qué eran todas esas máquinas, no tenía miedo cuando se llevaron a mi bebé... Me explicaron que era para medirla. Me la trajeron de vuelta muy rápido. Parece una muñeca, ¿a que sí?

'clínica de la sonrisa’ responde a necesidades críticas

La instalación es una de las cuatro llamadas "clínicas de la sonrisa" en Haití. Estos centros apoyados por el UNFPA ofrecen una gama completa de servicios, incluyendo la atención prenatal, el asesoramiento en materia de planificación familiar y atención obstétrica y neonatal de emergencia básica, todos gratuitos.

Las clínicas también ofrecen capacitación práctica a las nuevas matronas.

El director de la clínica Petite Place Cazeau, el doctor Harold Scutt, insiste en que las matronas tomen las riendas de todo el cuidado obstétrico y del recién nacido. Es el reconocimiento del papel crítico que las matronas pueden y deben desempeñar para salvar la vida de las mujeres.

"La formación en obstetricia contribuye directamente a la reducción de la mortalidad materna", dijo. "Por ejemplo, aprenden a detectar los primeros signos de la eclampsia, lo cual es clave ya que la preclamsia y la eclampsia siguen siendo las principales causas de muerte materna durante el parto".

Estos servicios son esenciales en Haití, que tiene la mayor tasa de mortalidad materna del hemisferio occidental.

Las mujeres haitianas tienen una probabilidad de 1 sobre 90 de morir por causas relacionadas con el embarazo a lo largo de su vida, según el informe Tendencias de la mortalidad materna de 2015. Por el contrario, una mujer en Canadá tiene una probabilidad de 1 sobre 8.800 de morir por tales causas.

La vulnerabilidad del país a los desastres naturales no ha ayudado a nada. Catástrofes como el huracán Matthew del año pasado reducen el acceso de las mujeres a las instalaciones de salud.

Incluso cuando las mujeres llegan a las clínicas, a menudo encuentran que el personal escasea. Según el doctor Reynold Grand Pierre, director de salud familiar del Ministerio de Salud, "más de un tercio de las matronas capacitadas por el gobierno abandonaron el país entre 2010 y 2012."

Incrementar el número de matronas

El UNFPA está trabajando con el gobierno para incrementar la oferta de matronas bien capacitadas.

En el centro de Puerto Príncipe, cerca de Cité Soleil, el Hospital Isaiah Jeanty acoge temporalmente la Escuela Nacional de Obstetricia en contenedores resistentes a los terremotos.

El edificio original de la escuela fue severamente dañado por el terremoto de 2010. Se reabrió en 2013 con el apoyo del UNFPA y el Ministerio de Salud. El UNFPA también presta asistencia en materia de transporte, equipo y plan de estudios.

"¿Sabía usted que en 2013 sólo teníamos 211 matronas en todo el país?", preguntó Quettly Chevalier, director del instituto. La Organización Mundial de la Salud ha estimado que se necesitan por lo menos 2.200 parteras para reducir significativamente la mortalidad materna.

La escuela está cerrando constantemente esta brecha. De 2000 a 2017, formó a 349 matronas, y más de 80 estudiantes de obstetricia están actualmente matriculados en el programa.

Trabajando con amor

El viernes 5 de mayo fue el Día Internacional de las Matronas, un día para celebrar el trabajo de las matronas de todo el mundo y para resaltar la necesidad de más trabajadores de la salud formados en estas habilidades que salvan vidas.

La atención dispensada por las matronas se considera altamente rentable. Con la formación y el apoyo adecuados, las matronas podrían evitar aproximadamente dos tercios de todas las muertes maternas y neonatales, según los expertos. También aprenden a proporcionar atención sensible y digna que mejora la confianza de las mujeres en el sistema de salud.

Eso era cierto para Gertrude Duval, que estaba descansando en la cama al lado de Elizabeth. La Sra. Duval acababa de dar a luz a su segundo hijo.

"Es muy diferente del hospital en el que tuve mi primer hijo", dijo.

Su experiencia fue notablemente mejor gracias a profesionales como la matrona Résa Pierre.

"Al ayudar a una mujer que da a luz, cada movimiento debe ser preciso, rápido y preciso. Somos responsables de dos vidas ", explicó la Sra. Pierre.

"La obstetricia es una profesión muy noble", dijo. Pero "a menudo se subestima, incluso se ignora".

Sin embargo, anima a otros a unirse a ella, y les aconseja seguir el ejemplo de innumerables matronas de todo el mundo y a "hacer su trabajo con amor".

–Vario Serant (traducido del Inglés por Arancha Cavanillas)